El nacimiento de los Tribunales Agrarios es el resultado de una prolongada lucha agraria y de las demandas campesinas que provocaron la Revolución mexicana en 1910. Sus testimonios jurídicos quedaron plasmados en una Legislación Agraria que va desde 1915 hasta 2016, con su última versión. Esta obra se adentra en el estudio de la teoría procesal como base para la debida interpretación de la norma jurídica adjetiva en materia agraria. Partiendo de los principios que rigen y caracterizan al juicio agrario y estableciendo la relevancia que tiene el debido proceso legal y los presupuestos procesales, aborda cada una de las etapas del proceso agrario, desde la presentación de la demanda, hasta la ejecución de la sentencia, en su caso, incluyendo de manera sencilla los medios de impugnación permitidos por la ley. Asimismo desmenuza cada uno de los elementos formales que debe contener la demanda, la contestación de la misma, las notificaciones, los escritos de ofrecimiento de pruebas e, incluso, los elementos sustanciales y formales de la sentencia; de igual manera, actualiza los criterios jurisprudenciales que han sustentado los distintos órganos del Poder Judicial Federal sobre la materia agraria en su parte adjetiva, por lo que resulta de gran utilidad para todos los involucrados en esta noble actividad jurisdiccional.