Este ensayo abarca, de una forma panorámica, el ámbito de la sexualidad y el rol que la mujer desempeñó a lo largo de la etapa histórico-política conocida como ?franquismo? en España. El sometimiento de la mujer a los dictados autoritarios y la supremacía sobre ella del varón fueron una constante en todos los órdenes de la vida familiar, social, económica y política del régimen. La Iglesia católica se posicionó del lado de los vencedores, del bando llamado nacional, y, en armonía con los postulados mantenidos por el franquismo, postergó a la mujer, cercenando su nivel intelectual y atendiendo, de forma exclusiva, al papel de la fémina como esposa y madre abnegada. Política y religión se dieron la mano en estos aspectos, caminando juntas y logrando que la mujer fuera relegada a los ámbitos estrictamente domésticos, sin participación alguna en la vida laboral o profesional, más allá de lo anecdótico, al menos. Otras facetas de la vida social, como el cine, el teatro o la literatura, se vieron fuertemente reprimidas, en aras de conservar siempre intacta la pureza de las costumbres y de la denominada moral.